Un día de lluvia pasó cerca de un grupo de gatos un perro sabio.
Y viendo el perro que los gatos parecían estar absortos, hablando entre sí,
y que no advertían su presencia, se detuvo a escuchar lo que decían.
Se levantó entonces un gran gato grave y circunspecto, miró a sus compañeros,
y les dijo : " Hermanos, orad; y cuando hayáis orado una y otra vez, y vuelto
a orar, sin duda alguna lloverán ratones del cielo".
Al oír esto, el perro rio para su adentros, y se alejó de los gatos, diciendo :
"¡Ciegos, inutiles, tontos, ignorantes e insensatos felinos! ¿No es cierto
y yo tengo certeza y lo he sabido siempre, y mis padres antes que yo, que lo que llueve
cuando elevamos al cielo plegarias son huesos , y no ratones?
KHALIL GIBRAN - EL LOCO